Crónica - Formación para el Voluntariado (Sesión 1: Comunicación para la Inclusión)

26.02.2021

Jazmin, Hamza, Ayoub, David, Usue, Pilar, Youssef, Fanny, Gabriela, Sabina y Sofía.

Hoy en OnDoaN hemos tenido la primera formación de voluntariado después de muchos meses sin poder juntarnos. Lo cierto es, que hoy tampoco hemos podido estar todos sentados en círculo, pero gracias a la tecnología he podido estar ahí presente.

Ha habido reencuentros y caras nuevas, una oportunidad única de poder aprender junto a David MacDonal sobre "Comunicación para la Inclusión". Solo con ver el titulo se puede deducir la temática de estas dos horas: la importancia de una buena comunicación para poder vivir en relación con el mundo. Pero algo que a simple vista parece evidente, puede esconder muchas complicaciones. 

Tras leer unas noticias, hemos podido observar que el vocabulario posiciona, y lo que esta pensado para informarnos puede hacer todo lo contrario. Ya que, depende de como se escriba una noticia puede ser completamente distinta, aunque la realidad sea la misma. 

Teniendo esto en cuenta, siendo conscientes del poder de las etiquetas en nuestro vocabulario y de la necesidad de reaccionar contra todo aquello que vemos, David nos ha guiado con algunas preguntas: ¿Cómo escuchamos? ¿Cómo nos comunicamos? ¿Cómo conseguimos comunicarnos de verdad?

Escuchar, parece algo sencillo de hacer, pero en una sociedad como la nuestra su utilidad queda a veces difusa. ¿Escuchamos para descubrir o lo hacemos para valorar? Constantemente parece que escuchamos para poder hablar, aunque no sepamos de que va el tema. Por ello, es imprescindible usar la conciencia y contrastar aquello que hemos oído, leído, visto... y saber si es cierto o no, más en la época de la desinformación que vivimos.

Al saber escuchar y contrastar lo de fuera, podremos descubrir qué hay dentro, y gracias a ello, comunicarnos de verdad. En definitiva, comunicamos para transmitir aquello que queremos que sea visto o sentido por los demás (o por nosotros mismos). Por eso debemos saber cuándo comunicamos y el poder que tiene, cómo pude afectar en los demás y en nuestra realidad. Sería sencillo resumirlo en una frase: viviendo me comunico. Pero a su vez crea muchos conflictos en nuestro interior. Porque, ¿Somos conscientes de todo lo que hacemos? ¿Estamos de acuerdo? ¿Nos sentimos orgullosos?

Cuando afirmamos que vivir es comunicar, nuestro discurso es demasiado amplio, con muchas influencias exteriores, lo que nos lleva a un proceso de deconstruir el discurso. Empezar a pensar en las etiquetas y los elementos que usamos para expresarnos, y analizar de dónde vienen, contra qué hablan y porqué.

Esto nos lleva a otro aspecto de comunicarse; discutir. El debate que se crea cuando se juntan varias personas con ideas y realidades diferentes. En la formación nos han presentado varios Trucos para discusiones de bar, pero hoy en día en el bar no tenemos mucha oportunidad de estar, por lo que sería más apropiado llamarlos Trucos para discusiones de videochat. Porque lo queramos o no, la comunicación online cada vez tiene más peso en nuestro día a día.

A menudo discutimos sin saber lo que es discutir, mucho menos sabiendo el tema realmente importante detrás de las frases subidas de tono. Y así seguimos alimentando una polarización basada en la acción-reacción, en un discurso determinado que tenemos delante pero no somos capaces de ver: el discurso del odio. Para enfrentarnos a él, a esas discusiones, David nos ha explicado varias pautas. La primera no separar. No crear grupos ellas/os nosotras/os. Ya que al hacer esto, seguimos dando fuerza a ese discurso, usando su vocabulario y pautas. Por ello, crear un nuevo marco es fundamental, romper con lo que se dice, sin usar tantos datos que deshumanizan y, en su lugar, poniendo en el centro la esencia de las personas, el sentir.

Comunicarse de manera segura, clara y coherente nunca ha sido fácil. La formación de hoy es un ejemplo de ello, no solo por el hecho de las diferencias personales y lingüísticas. Siendo un tema tan importante para todos, algo que David comunica viviendo, nuestras realidades y confinamientos crean unas barreras que hasta hace poco ni imaginábamos.

Lo que nos ha quedado claro hoy ha sido que, cuando mil etiquetas nos meten en círculos diferentes, lo que nos hace iguales es el querer formarnos. Y que todos vamos al baño, claro.

Usue Odriozola Nava