Crónica - Ratos Rutas Retos - Salida Cultural Bilbao
¡Próxima escapada el 27 de noviembre a Bilbo! Las ganas se notan, la lista empieza rápidamente y la gente se apuntar sin pensarlo dos veces. ¡Qué ilusión me hace compartir con ellos el día en la ciudad donde ahora vivo!
Xabi y Abdellah nos ponen los dientes largos cuando nos cuentan el plan: una ruta guiada en barco por la ría... visita al Guggenheim... ¡La espera se nos empieza a hacer larga, qué ganas!
Ha llegado el día y para darle más emoción al comienzo, nos encontramos con la mayoría de las calles de Donosti cortadas porque hay maratón. Pero nada nos impide llegar a tiempo a la estación de autobuses. Creo que soy la última, ya estamos todos. Hacía tiempo que no veía al equipo y veo que hay nuevos fichajes, qué ilusión me hace ver que el grupo crece cada día. Nos montamos en el bus y ¡rumbo a Bilbo!
Una vez más, los organizadores nos encargan un día estupendo, buena temperatura e incluso un poco de sol. Teniendo en cuenta la semana que había hecho... toda una suerte la nuestra. Nos bajamos en la parada de San Mamés y, a pesar de no ser del Athletic, ¡que quede claro!, no podemos perder la ocasión de darle un rodeo al estadio de fútbol. Seguimos la ruta y nos dirigimos hacia el Casco Viejo o Zazpikaleak, pasando por el centro de la ciudad. Aprovechamos las paradas fotográficas para inmortalizar los momentos y así poder hacer algún que otro descanso. En el Casco Viejo ya se empieza a notar más ambiente. Pauli, que vivió durante una temporada larga por estas tierras Vizcaínas, nos guía ágilmente entre las calles consiguiendo que ninguno de nosotros se pierda. Poco a poco nos vamos acercando al barco, nuestra ruta empieza a la una y conseguimos sentarnos todos en la azotea, al aire libre, para disfrutar mejor de las vistas. Todo va sobre ruedas. Vamos con audio-guía para poder entender mejor la historia de los sitios más emblemáticos de la ciudad. ¡Súper recomendable para el que quiera conocer las curiosidades de Bilbo!
Durante la ruta algunos no pueden esperar a picar algo de comida, las tripas empiezan ya a rugir... ¡hay hambre! Por lo que, nada más acabar el paseo, nos acercamos hacia el museo y nos sentamos todos juntos para compartir y zamparnos lo que nos habíamos traído desde casa. Entre bocado y bocado, nos ponemos al día de las noticias: Abdellah va a pasar unas semanas a Marruecos y seguro que, a celebrar los partidos del mundial, pronto es el cumpleaños de Laia y Jone, ¡qué mayores se hacen!, Denis se ha quitado de encima la primera tanda de exámenes... ¡cuántas cosas que contarnos!
Ya llega la hora de entrar al museo, allí nos espera una chica muy maja que será la que se encargue de guiarnos y explicarnos los diferentes rincones del lugar, no queremos perder ni un minuto así que nos juntamos rápidamente y empezamos la aventura. Figuras enormes, cuadros curiosos y esculturas divertidas. Nos encanta y nos gustaría pasarnos allí toda la tarde, pero el autobús de vuelta no espera así que nos despedimos con pena de ese lugar y nos encaminamos al punto de partida, la estación.
Ahora sí, me toca despedirme, yo me quedo y ellos se van, ¡qué raro se me hace! Ha sido un día estupendo. Esta vez era un reto diferente pero la ruta y los ratos que hemos pasado desde luego que han sido maravillosos. ¡Nos vemos en la próxima!
Gabriela Garaizabal
