Crónica - Taller de Constelaciones Familiares

Sanar heridas, caminar hacia más luz. 

Durante muchos años había leído acerca de constelaciones familiares, pero hasta este sábado no he tenido ocasión de experimentarlas por primera vez en vivo. Era la tercera sesión que impartía Arantza en OnDoaN en este curso, y ha tratado sobre "Sanar heridas". Aunque no participé en las anteriores pronto me he sentido integrada dentro del grupo: rostros cuyos nombres acabas de conocer y que a lo largo del día (en los ejercicios por parejas y en las constelaciones concretas) se van abriendo y nos vamos ofreciendo esa apertura sincera que nos hace sentir en casa, confiados, porque no es fácil exponer la propia vulnerabilidad. Arantza nos ha ayudado creando un clima de apoyo y seguridad donde poder nombrar las heridas familiares, entrever dónde se atasca la vida y descubrir cómo caminar hacia más luz… Sentir que, en verdad, algo se mueve, aunque se necesite tiempo para dejar que vaya sanando y ordenándose adentro. Me he dado cuenta de que también aprendes al contemplar las constelaciones de los demás, y al ponernos al servicio unos de otros.

Gracias a Arantza, a Pauli, y a Sonia por el abrazo que compartimos, y a cada una de las personas por las vivencias y por esos pequeños pasos que van liberando el amor adentro. Eskerrik asko hainbestegatik!

Mariola López Villanueva