Hoy, Día Internacional del Pueblo Gitano, tenemos el gusto de presentaros a Palmira, una joven gitana de 24 años que nació en Irún y que es la cuarta de una familia de cinco hermanos.

Palmira trabaja cada día con el fin de eliminar prejuicios que existen en la sociedad hacia su pueblo y, sobre todo, intenta visibilizar aquello que durante años se ha invisibilizado, por ejemplo, la historia de persecución que ha sufrido el pueblo gitano.

Cree en la Educación como herramienta para el cambio y es una persona siempre dispuesta a aprender. Cursó Técnico en Actividades Comerciales pero, lo que realmente le gusta es la intervención social y actualmente trabaja como mediadora sociocultural. Es representante de las asociaciones Kale Dor Kayiko, gitanos y gitanas del mañana y Sim Romi Gipuzkoaqe de mujeres gitanas de Irún.

1· Palmira, hoy se celebra el Día Internacional del Pueblo Gitano. ¿Nos contarías brevemente cuál es su historia? ¿Cómo es vuestra cultura? 

Se dice que el origen del pueblo gitano es rumano, pero no es así. Nosotros salimos de la India de la pequeña región del Punjab, ubicado al noroeste del país.

Región de Punjab, India. 

Allí hubo guerras, como las que suceden hoy en día todavía, y los habitantes salieron en busca de paz, de oportunidades, en definitiva, de una vida mejor. Salimos de la India en carruajes, sí, éramos nómadas. Hace 600 años llegamos a la Península Ibérica. ¡Hace 600 años! No estoy diciendo hace diez ni hace cien años, sino mucho más tiempo. Sí que es verdad que la mayor parte de la población gitana se asentó en Rumanía y por eso se piensa que su origen está allí, pero nuestro verdadero origen es la India.

Al llegar a la Península, hacia el año 1425, había mucha multiculturalidad. Nosotros estábamos en situación de poder dar trabajo a otras personas. Éramos tratantes de ganado, caldereros, tejíamos cestas de mimbre... Se puede decir que la gente de aquel entonces era aceptada.

Más tarde, durante el reinado los Reyes Católicos entre 1479 y 1504, vinieron grandes cambios. Hicieron leyes en contra del pueblo gitano para poder expulsarlos de país. Hubo mucha represión y castigos fuertes e injustos hacia nosotros.

Años más tarde, hacia 1749, tiene lugar la gran redada en Zaragoza donde actualmente se encuentra la sede del parlamento. Allí encarcelaron a muchas mujeres y niños de raza gitana menores de siete años, mientras que, a los hombres junto con los niños mayores de siete años, les obligaban a realizar trabajos forzosos. El objetivo era claro: extinguir nuestra etnia separando a hombres y mujeres para que no se procrearan. Simplemente por ser de una cultura diferente.

Yo, hace poco me enteré de lo que ocurrió allí. Me impactó bastante, pero me impacta más aún el que no haya nada que rememore aquella tragedia ni a las personas que la sufrieron.

En la segunda guerra mundial, entre 1939 y 1945, también estuvimos en los campos de concentración. No solo sufrieron las personas judías como mucha gente cree, el pueblo gitano sufrió también las terribles consecuencias de la guerra.

Por lo tanto, a lo largo de la historia, desde que salimos del Punjab, ha habido muchas leyes en contra del pueblo gitano. Solamente con decir que hace 600 años llegamos a España y todavía hoy no se sabe nada de nuestro pueblo cuando se puede tener una persona gitana como vecino o amigo... da qué pensar, y mucho.

El 8 de abril de 1971 fue el primer congreso de personas gitanas. Aunque llevamos mucho más tiempo en activo, fue ese año cuando se decidió que íbamos a tener un himno, una bandera y un nombre que nos uniese a todos. 

Bandera del Pueblo Gitano. La parte de abajo, que es la hierba, representa el nomadismo. El cielo es nuestro techo, no teníamos casas. La rueda tiene 16 radios igual que la de la bandera de la India para no olvidar nuestro origen. Y su color, por la sangre que se derramó por todas las personas que han muerto luchando por su pueblo. 

El himno gitano, Gelem, gelem (Anduve, anduve), fue compuesto por Jarko Jovanovic y recuerda a los gitanos y gitanas víctimas del nazismo.

Las personas gitanas no solo somos españolas, euskaldunas o italianas, estamos por todo el mundo. Y se decidió que ese nombre que con el que todos nos sintiéramos identificadas fuera "Rom", que significa libertad en romaní (o romanés), nuestro idioma oficial. Por eso, ese día se convirtió en el Día Internacional del Pueblo Gitano. 

Nosotros hace apenas 50 años que estamos oficialmente matriculados en las escuelas, lo cual es muy importante teniendo en cuenta que antes no se nos quería en ellas. No se quería que una niña/o gitana/o perteneciera a una clase o grupo porque se pensaba que éramos peligrosos, entre otros prejuicios equivocados.

Siendo esto así, se puede entender el punto en el que actualmente se encuentra el pueblo gitano. Me da pena pensar que haya gente que no considere a una persona gitana por el hecho de no vestir chándal o no vivir en una furgoneta. Y por esta razón, a nosotras, las personas gitanas que estudiamos, se nos invisibiliza porque no entra en la cabeza que pueda ser gitana un/a joven que decida realizar estudios. 

2. ¿Qué representa hoy para ti ser gitana? ¿Ha cambiado este sentimiento desde que eras una niña?

Personalmente, soy una de las muchas jóvenes gitanas que hoy en día lucha por la visibilidad. No solamente estamos asociadas a la marginación o al riesgo de exclusión social si no que somos como cualquier otro joven que hace su vida independientemente, que tiene sus estudios, su trabajo y sus sueños. Por un lado, me siento representante o representada por esas mujeres, por la libertad, independencia, autonomía y, por otro lado, lo que estoy haciendo ahora, que sería más el trabajo o las metas profesionales; poder visibilizar lo que ha pasado en la trayectoria del pueblo gi

Y sí, el sentimiento ha cambiado. Cuando era pequeña era la niña gitana de clase, y en general, me trataban normal, pero había momentos en que era la gitana y por ello, no me invitaban a los cumpleaños o no me podía quedar en el parque con mis compañeros/as. En ese momento no lo entendía porque lo que vivía no pensaba que fuera diferente. Pero sí me preguntaba a mí misma por qué me pasaba o por qué era gitana. Al igual que muchos otros, yo me sentía sola en el colegio y sentía que nadie creía en mí. Y, cuando eso pasa, inevitablemente tu autoestima cae y dejas de lado los estudios porque no tienes ganas. Cuando uno realmente está bien consigo mismo, es cuando se motiva para seguir adelante estudiando.

Sin embargo, este sentimiento ha ido cambiado a lo largo de los años y cada vez me siento más orgullosa de ser gitana. Orgullosa por todo el pasado que hemos tenido. Nos han intentado extinguir como etnia más de una vez y no han podido. La unidad de la familia gitana se refleja a lo largo de la historia y es en parte gracias a ello por lo que no han podido hacernos desaparecer.

3. ¿Te sientes aceptada y acogida por la sociedad? ¿Has vivido alguna vez alguna situación incómoda por el hecho de ser gitana?

He tenido muchos momentos en los que, por no saber sobre mi pueblo, no he podido llegar a entenderme. En la "kuadrilla", cuando se acerca alguna persona nueva y me pregunta de dónde soy respondo que soy de aquí, euskalduna, y que también lo han sido mis antepasados. Sin embargo, por mi tez morena ponen en cuestión mi origen y me veo forzada a decir que es porque soy gitana. Y luego, vienen todas las preguntas cliché personales que me hacen como: ¿cuándo te vas a casar? ¿por qué con 24 años no lo estás todavía? Siento que son cosas que tienen que ver con mi vida, que una persona desconocida no tiene derecho a preguntar y que yo no tengo por qué responder abiertamente. Siento que invaden mi intimidad y mi persona. ¿Por qué hay que generalizar? No toda persona gitana, por el hecho de serlo, toma caminos iguales. Cada uno es diferente y toma decisiones diferentes.

Muchas veces por el hecho de no haber podido defenderme, me he ido dolida a casa, porque siento que soy la gitana del grupo y nada más. Ahora que conozco más mi historia, puedo compartir y hablar tranquilamente sobre ello. 

4. Como con muchas otras culturas también existen estereotipos y prejuicios sobre el pueblo gitano. ¿Cómo crees que se podrían romper?

Lo primero, se tendría que estudiar nuestra historia y cultura en los libros de texto para conocer y minimizar el riesgo de que surjan los prejuicios contra el pueblo gitano. Y, lo segundo, hace falta tejer redes para enriquecerse de manera bidireccional y así, poder dar y crear un puente entre nosotros.

5. ¿Crees que la sociedad está sensibilizada con el pueblo gitano? ¿Ha mejorado esta situación en los últimos años? Si no es así, ¿Cómo crees que se podrían conseguir avances?

Hace unos años, me sentía sola porque hay pocas jóvenes gitanas en Gipuzkoa que estén en un momento vital parecido al mío. Pero el trabajo me ha dado la oportunidad de conocer más eventos organizados por personas gitanas en la que participan muchos otros jóvenes que tienen inquietudes e intereses similares a los que tengo yo. Y ahí es cuando uno fuerzas y siento que no estoy sola.

He visto además que tanto por parte del pueblo gitano como por la sociedad ha habido cambios positivos. Entre otros, gracias al movimiento femenino que se está dando estos últimos años, entre las gitanas mujeres también ha generado un cambio positivo. Ahora, nos sentimos más partícipes y protagonistas, sentimos que nos quieren conocer y eso nos hace sentir bien y valoradas.

6. ¿Qué le pedirías a la sociedad en el día de hoy?

Sobre todo, creo que hay que incidir en los colegios. Los educadores tienen que enseñar a que la gente se quite la mochila de estereotipos que tienen tanto hacia los gitanos como hacia otras culturas porque a mí, esto me hizo mucho daño. Yo era una niña tranquila y formal y cuando llegué al instituto por no tener esa creencia en mí me pusieron en un estado de mala conducta y no lo deseo para ninguna otra niña. Quiero que nos conozcan como persona, pero individualmente, que no se tienda a generalizar porque eso hace mucho daño a los que no perteneces a ese grupo. 

7. ¿Crees que el cambio tiene que darse en la sociedad o también por parte del pueblo gitano?

Por ambos lados claramente. Nosotros seguiremos con nuestro activismo para visibilizar a esas personas gitanas que no vivimos en los márgenes de la sociedad, sino que estamos aquí. Queremos hacer ver a la gente gitana que sin estudios no se llega a ningún lado porque la educación da independencia y autonomía para poder defender al pueblo. Nosotros todavía tenemos mucho que hacer, por supuesto, pero para poder mejorar, necesitamos que por la otra parte también nos dé las mismas oportunidades y privilegios que al resto. 

8. Eres representante de una Asociación de Mujeres Gitanas. Cuéntanos un poco sobre esta: quienes sois, qué hacéis...

De hecho, trabajo en dos asociaciones: Kale Dor Kayiko y en la de Mujeres Gitanas Sim Romi Gipuzkoaqe.

Por un lado, en Kale Dor Kayiko, gitanos y gitanas del mañana lo que hacemos es que cuando Berritzegune [1]  nos deriva unas necesidades en ciertas escuelas, las cuatro educadoras que estamos, vamos a estos colegios y charlamos sobre la historia y cultura gitana. Es decir, nos encargamos un poco de la intervención escolar. Luego se hace también intervención familiar y comunitaria.

Por otro lado, en Sim Romi Gipuzkoaqe trato solamente temas de mujeres como el empoderamiento, por ejemplo. Estamos en proceso de cambiar el nombre de esta asociación que pasará a llamarse Khera que significa hogar en romanés. Actualmente estamos tres mujeres gitanas liderando y nos dedicamos a realizar también actividades y talleres de ocio y tiempo libre a los niños/as para ayudar a las familias más vulnerables e indirectamente saber cómo están en los estudios, en el colegio...

[1] Los Berritzegunes, configurados como servicios de apoyo, son instrumentos educativos para la innovación y mejora de la educación nos deriva unas necesidades en escuelas y estamos cuatro educadoras que vamos a esos coles y en el que charlamos sobre historia y cultura. 

9. ¿Qué papel juega la mujer en la cultura gitana? ¿Las dificultades son mayores si además de ser mujer eres gitana?

El papel de la mujer contrariamente a lo que se piensa es muy importante. Erróneamente se piensa que las mujeres estamos oprimidas y siendo gitanas el doble. Pero la mujer gitana es la que lleva las riendas de su familia. Las decisiones las toma el hombre junto con la mujer. No se deja de lado su opinión.

Mi madre es para mí un gran referente, siempre ha sido la que ha dirigido mi casa al igual que mi abuela. Ellas tienen un papel fundamental. Todo el trabajo que han hecho para que hoy yo esté aquí como estoy, es heroico. "Las mujeres somos el motor del cambio de nuestra cultura". Mi abuela generó un cambio, mi madre también lo hizo y ahora me toca a mí. Pienso también en mis sobrinas que vienen detrás y en lo que podrán hacer ellas para seguir avanzando por el camino. Esta posibilidad de seguir avanzando es esperanzadora e ilusionante para mí.

10. Hoy en esta sala hay diversidad cultural, pero tenemos algo en común: somos personas jóvenes con inquietudes y con ganas de generar un cambio en la sociedad. ¿Qué te gustaría decirle tú como mujer, joven y gitana a aquellos jóvenes que tienen prejuicios sobre vuestro pueblo?

Que no se queden con los aspectos superficiales de una persona gitana, sino que la conozcan a fondo, que conozcan su historia, cultura y raíces para que se acerquen sin miedo. Lo desconocido asusta y por eso no hay que tener miedo a acercarse y conocer. Los gitanos, como todas las personas, tenemos valores y queremos que el resto los conozca.

Muchas gracias Palmira por esta entrevista. Ha sido una suerte poder conocer de primera mano un poco mejor la historia de vuestro pueblo. ¡Hasta pronto!

Entrevista realizada por:

Para el recuerdo...

Anduve, anduve por largos caminos
Encontré afortunados romà
Ay romà ¿de dónde venís
con las tiendas y los niños hambrientos?

¡Ay romà, ay muchachos!

También yo tenía una gran familia
fue asesinada por la Legión Negra
hombres y mujeres fueron descuartizados
entre ellos también niños pequeños

¡Ay romà, ay muchachos!

Abre, Dios, las negras puertas
que pueda ver dónde está mi gente.
Volveré a recorrer los caminos
y caminaré con afortunados calós

¡Ay romà, ay muchachos!

¡Arriba Gitanos! Ahora es el momento
Venid conmigo los romà del mundo
La cara morena y los ojos oscuros
me gustan tanto como las uvas negras

¡Ay romà, ay muchachos!